Nos estamos descubriendo como Maestros de la Manifestación. Cada uno de nosotros tiene capacidades divinas para llevar su energía espiritual al mundo físico, lo que transforma el sufrimiento en amor. Esta carta confirma estas capacidades y nos invita a crear desde nuestro Corazón.

En la Lemuria etérica, la energía cósmica de los cielos, rebosante de alegría, estaba preparada para manifestarse en lo físico, reflejando el deseo divino de unidad para experimentar la multiplicidad. Ese deseo, sin ningún esfuerzo, movilizó a muchas fuerzas de luz, incluidos seres cósmicos, angélicos y elementales. Muchos maestros ascendidos guiaban este proceso de luz, la creación del Edén lemuriano.

Al igual que la unidad pudo tomar forma, en un abrir y cerrar de ojos en términos cósmicos, también nosotros podemos manifestarnos amorosamente sin ningún esfuerzo. Es la gracia divina la que crea el espacio para ello en nuestras vidas, la que nos permite elegir lo que nos gustaría manifestar.

¿Estás contento con tus creaciones? Lo que hay en tu campo energético, las vibraciones específicas de amor y luz, crean un plano y una imagen en el mundo físico. Los pensamientos, emociones o relaciones kármicas en tu campo, aunque no se manifiesten físicamente en tu vida, distorsionarán la imagen del plano. Tus guías te piden que sueltes las energías de la vieja Tierra para crear espacio para el verdadero Cielo en la Tierra.

¿Te sientes impaciente, te gustaría manifestarte al instante? Tus guías te piden que estés atento a las sincronicidades y a las señales en tu vida. Sintoniza con las vibraciones, los acontecimientos y las conexiones de luz, más allá del espacio y del tiempo, que forman parte de tu manifestación. Siente los dichosos resultados, sin atarles expectativas, para descubrir cada vez más tus capacidades de manifestación.

Los maestros de la manifestación también saben soltar el control. La energía divina te llega cuando tus manos están abiertas, cuando estás disponible para jugar. Sintoniza con esta energía espontánea, este amor y libertad, para que tu alegría se multiplique por lo divino.

Éste es el retorno a la Energía Lemuriana, el Edén alegre y libre de los juicios de la mente. Ésta es la fuente desde la que manifiestas la Nueva Lemuria, que integra la alegría y la pureza lemurianas en la Nueva Tierra. Sintoniza con tu Verdadero Ser para crear desde tu Corazón de Alegría, porque ésta es tu fuente como maestro de la manifestación.